Influencia de las lenguas semíticas

Fragmento de “Influencia de las lenguas semíticas en la española”, discurso de Ingreso en la Real Academia de la Lengua, leído el 25 de Marzo de 1861.
(En Obras de D. Severo Catalina. Madrid, 1876-1877 (Imp. y Fundición de Manuel Tello).

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“El origen de nuestro idioma no puede fijarse en absoluto; lo empequeñeceríamos si
lo declarásemos producto de la corrupción del latin; porque de las corrupciones no brota nada bello, y nuestro idioma lo es: lo empequeñeceríamos asimismo si lo declarásemos de puro corte semítico, porque sería quitarle, á sabiendas, las condiciones de variedad y flexibilidad que le ha dado el contacto con diversos pueblos, que le ha proporcionado la clásica civilización occidental. Yo aspiro para la lengua castellana á más alto timbre que el de ser neo-latina ó el de ser neo-semítica: entiendo
que sintetiza las dos razas; que tiene de ambas lo mejor: hay en ella toda la aptitud conveniente para expresar cuantos pensamientos y afectos quepan en la cabeza y en el corazón; todos los adelantos que logren las ciencias; todos los descubrimientos, modificaciones ó innovaciones que nos ofrezcan las artes, la política ó la frivolidad; para todo hay expresión, para todo hay palabras y genuino y fácil acomodamiento en nuestro lenguaje; tiénenlo asimismo aquellas locuciones orientales, aquel modo de sentir, pensar y creer de remotos pueblos que tanto influjo ejercieron en el desarrollo científico y literario del linaje humano: la elasticidad indo-europea y la rigidez semítica felizmente combinadas, forman el constitutivo esencial del idioma castellano.
Franco, varonil, sonoro en unos casos; y en «otros inflexible, severo, preciso; variado y grandilocuente en un concepto, sobrio y comedido en otro; ni la elasticidad lo hace irregular é inmanejable, ni la rigidez lo endurece hasta el punto de romperse ó de necesitar prestados atavíos; no ha menester de largos períodos para cerrar graciosamente sus cláusulas, ni carece de incisos ó estancias cortas con que amenizar su vastedad. Tal es, señores, nuestra hermosa lengua castellana: á través de las capas latinas que forman buena parte de su caudal, se descubren en el fondo preciosos restos semíticos.

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